lunes, 31 de agosto de 2009

Como triunfar en el MIO

Hace un par de años, hablar de Cali era sinónimo de hablar de salsa, del chontaduro, de las tres cruces, de los Rodríguez o de Juanchito. Pero hoy en día, para hablar de Cali, sin lugar a duda hay que hacer referencia del MIO.

Para nadie es un secreto que el MIO es la falsa esperanza del desarrollo de una ciudad que ha sido terriblemente perjudicada por las malas administraciones que no han hecho mas que robarse la plata, nuestra plata –la plata mía de mi mamá-

De ante mano digo que no tengo nada en contra del MIO, por el contrario, de verdad me parece que es algo que necesitábamos los caleños desde hace mucho tiempo. También, cabe aclarar que no soy usuario de este, solo lo he utilizado un par de veces, las suficientes para analizarlo y sacar un par de hipótesis de cómo sobrevivir al tan temido monstruo azul.

Si uno es estudiante universitario, por lo regular siempre sale mal librado. Pues, si en la infinita suposición uno logra coronar puesto, uno no se ha terminado de sentar y ya lo están parando.

-uich, dele el puestico a la señora, mire usted tan joven, tan lleno de vida, ni que estuviera cansado- le dicen a uno

Y uno como que… no que va, solo estoy en semana de parciales, acostándome tipo tres de la mañana, levantándome re temprano, aguantándome clases tan jartas como ética, no he comido un culo, me he mamado medio viaje parado… pero no, no estoy cansado, para nada.

-claro, bien pueda mi señora- termina uno diciendo

A uno le queda como la espinita, ¿si se lo merecerá? Mínimo es de esas viejitas cansonas que no se la aguanta es pero nadie allá en el barrio, que joden por todo, esas que meten en chismes a cualquiera, que pecan mas que uno y que piensan que ya tienen ganado el cielo que por que mantienen metidas en la iglesia.

Ahh y sin decir que no creen en nadie que porque el curita se les sabe el nombre… ayy esos curitas… cosa seria.

Pero bueno, en esta oportunidad no me voy a referir a estos chicuelos que tanto me caen bien.

En esta ocasión me quiero tomar el atrevimiento de recomendarles unos tipsitos para que su estadía en el MIO sea lo mas amena posible.

Empecemos desde el principio –obvio, ni modo que uno empiece desde el final, aunque podría ser, uno nunca sabe- cuando uno va de la U a la casa, siempre le toca esos alimentadores llenísimos –que ironía, uno siempre se monta ahí con culo de hambre- en el caso concreto a los de la UAO. Pues es la ultima universidad a la que llegan a recoger a la people.

Aprovecho para sembrar una inquietud que tengo ¿Qué ganan dejándolo a uno como a dos cuadras de la estación? ¿Qué pasa cuando esta lloviendo? ¿Qué se mojen por maricas cierto? Quién los manda no, si no les gusta que compren carro.

Entrando en materia, mis queridos amigos, si corona puesto a mitad del recorrido, apenas lo haga, hágase el dormido. Pero antes échese un bostezo bien grande, que suene duro para que todo el mundo lo oiga, o para que al menos sientan ese aliento a papa sucia que algunos se mandan a eso de las 12:30 –yo también me mando mis sandwichitos con salsita de ajo, pero que quede entre nos-.

El caso es que apenas corone puesto, sea a mitad de camino, o sea porque allá en estación Universidades voleó puño y pata a la loca para conseguirlo –ojo, no es que agarre a pata a una pobre loquita, no, es un decir-. Apenas se siente, a hacerse el dormido se dijo, eso no hay viejita cansona que valga. Lo malo, y ojo a esto: es que como uno si va bien mamado, a contrario de lo que piensa lo otra gente, es factible que uno se quede dormido de verdad.

Lo digo por experiencia, la otra vez iba lo mas de relajado en el MIO sentado adelante, y no fue por volear pata, ese no es mi estilo, solo fue simple sentido común: Salió una ruta tetiadisima a la cual no me quise montar, y dos minutos después, salió la misma ruta lo más de vacía. Yo, ni corto ni perezoso me dispuse a sentarme en el primer puesto del bus –si no es así no ocupo un primer puesto nunca- al lado de la ventana, pues iba a tomar un par de foticos para el parcial de fotografía.

Todo iba bien hasta cuando se subió una señora cargando a un niño, y como el bus ya iba lleno, yo ya había hecho mi preámbulo, un par de bostezasos bien duro, y en cuanto vi a la señora, con el dolor de mi alma cerré mis ojitos y me hice el dormido. Ahh, que me desperté por allá cerca a la 14 de calima es otra cosa, pero no me dejé parar de nadie.

Otra, mis queridos lectores, es que cuando no coronen puesto –suena raro verdad: uich, me corone el puestico- y vayan acompañados, confabulicense con alguien para lograr que le cedan el puesto.

La vuelta es la siguiente:

Primero, ponga una cara bien hedionda para que su amigo le pregunte:

-y que huevon ¿como seguiste de esas churrias que tenias la otra vez?

A lo que usted debe responder algo así como:

-no marica re mal, eso nada que se me quita, yo creo que es esa tal porcina

-¿será? –preguntará el amigo

-claro, si le dio a my president ¿Por qué a mi no?

Si eso no funciona, no se, invéntese otra cosa, pregúntele a su amigo que como siguió de los ataques epilépticos, cosas así. En el peor de los casos, bájese en la próxima parada –si nunca ha montado, no diga: en la esquina por favor, yo se que es chiste viejo, pero no falta el panguano-, vuelva a estación universidades y saque el Tayson reprimido que tiene dentro, eso si, sin morder orejas, a mi me haría un favor, pero por su bien no lo haga allá: la gente a veces no se limpia bien las orejas. Es mas, quien quita y le haga eso a Julio Nava, se le devuelve y termina usted sin nariz. Y si hay algo mas malo que irse parado en el MIO, es sin duda, irse parado y sin nariz.


*Mami, no te enfermes más porfa, no ves todo lo que tengo que hacer cuando salgo de la U hacia imbanaco -entre otras-

lunes, 24 de agosto de 2009

Acto de Redención

De verdad lamento mucho que la publicación anterior haya despertado tantas susceptibilidades. Siempre hubo peros en mis columnas (llamadas antes como publicaciones), pero esta vez si recibí muchos peros respecto al vocabulario, pero, cabe anotar, que estos peros vinieron más que todo de los adultos mayores, quienes parece ser que no están acostumbrados a que la gente hable las cosas como son, como si no hubieran conocido a Garzón.

Uno de los reproches vino directamente de mi madre. Ella se indignó mucho por lo que escribí en mi pasada columna –uff ‘columna’, se oye hasta importante y todo- y era de esperarse, esa no fue la educación que recibí de ella, los hijueputazos no me los enseñaron en mi casa, ni más faltaba. Los aprendí en el colegio. También allá me brindaron la oportunidad de aprender a decir marica, pues les recuerdo que salí de un colegio de puros hombres, no de hombres puros.

Voy a aprovechar esta segunda oportunidad que me da la vida para retractarme de lo dicho. Es que eso es lo mío: aprovechar segundas oportunidades, en retractarme no tengo mucha experiencia, pero bueno, vamos a hacer el intento.

Nadie me pidió retractarme, pero creo que tengo la responsabilidad moral para hacerlo. Aunque bueno, no retractarme como tal, pero si decirlo de la forma que lo debí haber hecho desde un comienzo.

Vamos por partes

El comentario de Daniel Samper es verídico. Que de pronto lo haya escrito por hacerme sentir bien o algo por el estilo, eso es otra cosa, pero de que lo dijo, lo dijo.

No he comprado los boletos para Sudáfrica, ni marica que fuera, yo sé que no vamos a clasificar, por eso ahorro es para ir al mundial de Brasil (que quede claro que me estoy diciendo marica a mí mismo, no estoy irrespetando a nadie)

Padre Chucho: de verdad me arrepiento mucho el decir que tus misas son aburridas, antes al contrario, todas las misas son aburridas menos las que haces tú. Tienes algo que hace especial tu eucaristía, posees una magia sin igual. Me encanta como juegas a ser la estrella de la televisión, ese lenguaje tuyo tan cool, te metes tanto en el papel del súper sacerdote, que en ocasiones casi logro creerte. Con decirte que estoy esperando a que te comercialices más y lances tus misas al mercado en formato DVD, las compraría de una.

Aquí quisiera hacer un paréntesis para comentarte que me parece re chévere que ya te hayas involucrado en la estafa esta de mensaje de texto. Y es que tú estas para eso, para jugar con la fe de la gente y enriquecerte a punta de huevones y ovarionas, ¿como no se me pudo ocurrir a mí? Es un negociazo: solo comparado con el de Murcia Guzmán, o con el de los hermanos Uribe.

Aun así, sigo pensando que en cuestión de curas, las mejores son las de Hansaplast.

Quiero dejar en claro que yo me refería a los jugadores de esta selección: la actual, la que perdió contra Venezuela, la que nos humilló como nación.

A lo que voy es que lamento profundamente el haberles dicho lo que les dije, fui muy injusto con ustedes. En serio, para mí no son unos hijueputas, para mí lo que son es unos setenta hijueputas. Solo por las razones que di aquella vez: por habernos irrespetado como nación, nada más. No de la forma literal, no conozco a sus madrecitas, por ende, no es mi intención decir que sean ‘chicas traviesas’, para nada, antes me imagino de que deben de ser unas santas.

Debo confesar que no conforme con todo eso que nos hacen, en ocasiones el corazón se impone sobre la razón y termino creyendo todavía en ustedes, soy de los tantos que esperamos que en la ultima fecha Brasil pierda con Bolivia; Chile empate con Ecuador; y que Perú golee a Paraguay. Pero muy en el fondo confío en que no me defraudaran, que al final, cuando se acabe la eliminatoria, le demostraran al país que de verdad son unos setenta hp (pongamos pues ‘hp’ como para que suene más bonito, a la gente le incomoda menos que uno ponga ‘hp’, a que ponga hijueputa, como si no significara lo mismo)

De los comentaristas deportivos la verdad no quiero hablar, todos conocemos como son, como hablan, como se expresan; sabemos que no sirven para nada, que hablan por hablar, que tienen un reprochable uso del lenguaje, que siempre tienen un jefe a quien seguir. Que por lo regular es calvo, petulante y se le asigna el estatus de doctor. ojo: no he dicho nombres, pero seguro se les vino a la mente uno en especial.

Se autodenominan eminencias del deporte y creen que solo lo que ellos dicen es la absoluta verdad.

Podría gastarme una columna entera hablando sobre ellos, pero no, son tan poca cosa que no se lo merecen, aunque lo voy a pensar, sería un tema en el que todos vamos a estar de acuerdo.

Ya para terminar. Se que lo que he dicho se puede decir con un vocabulario mas moderado, de que todo el mundo se merece respeto y todo el cuento. Pero me rehúso a no decir las cosas como son, como las siento, y si es necesario el emplear palabras inadecuadas para expresarme tal cual como deseo, no dudaré en hacerlo. Infortunadamente me dormí el día en que en la iglesia dieron la cátedra de respeto. Pero antes de dormirme, recuerdo muy bien que oí algo acerca del amor, escuche de voz del padrecito de turno ‘amaos los unos a los otros’, me tomo mucho trabajo el entender muy bien que quería decir con eso, y mas aun, el porque hablaba en primera persona. Sin embargo, gracias a El Tiempo –el periódico- logré captar a que se refería en aquella ocasión, si saben de qué estoy hablando no. Ay padrecito, te tengo pillado picaron.

*Mami se que cuando te dije que me iba a retractar pensaste en algo tal vez un poco diferente. Lo siento, hice mi mayor esfuerzo.

sábado, 15 de agosto de 2009

A mis queridísimos jugadores de la selección

‘Me metí, lo leí y me gustó: hágale, dele para adelante que tiene muchísimo talento.
Eso sí: no se parece a mí, de lo contrario no sería tan elogioso... Abrazo’ Daniel Samper Ospina

Como fanático del futbol que soy, me encuentro en una encrucijada terrible. Pues, por un lado, espero ansiosamente que nuestra selección pueda clasificar al mundial del 2010, a tal punto, que ya compré los boletos de avión hacia Sudáfrica –jumm, que va-. Pero por otro lado, soy consciente de que no hay conque, que con este equipo no tenemos como ganar todos esos puntos que faltan por conseguir –ni donando los que tiene acumulados mi mamá en el EXITO- Lo peor de todo, es que mínimo llegamos a la ultima fecha con un pequeño chance de participar en el que es quizás, el mejor espectáculo deportivo del planeta –ya me los imagino a todos diciendo: solo es que le ganemos a Uruguay, que Brasil pierda con Bolivia, que Chile empate con Ecuador, y que Perú golee a Paraguay, nada más.

Toco este espinoso tema porque me parece un total vituperio los dos partidos amistosos que disputó Colombia la semana pasada, uno contra El salvador, y el otro, dizque contra Venezuela.

Me parece inaudito que la selección programe partidos ‘de preparación’ contra rivales de esa calaña –vamos a quedar preparadísimos-. Es que uno no sabe que pensar, si es bueno enfrentarse contra potencias futboleras para que nos humillen, nos bailen y nos pisoteen; o si es mejor jugar contra equipitos chimbos para poder ganarles y subir nuestro autoestima –el problema se da cuando estos equipos chimbos suben su autoestima a costa de nosotros, cuando nos convertimos en el equipo chimbo, de los que para nosotros son equipos chimbos, hasta yo me enredo pensando en eso, es una vaina compleja.

De la recocha contra El Salvador (dícese del arte de suponer que se juega un partido de futbol) poco me quiero referir, pues no le puse cuidado, hasta me quede dormido viéndolo. Es que un partido malo puede llegar a ser tan letal como una misa del padre Chucho. Después me enteré que ganó Colombia, pero por cómo se dio el resultado, es totalmente reprochable el no haberles metido una pela ni la hijuemadre.

El otro partido si que fue peor, el disputado contra nuestro país ‘hermano’ –Bolívar: que irresponsable fuiste. Para esa gracia no nos hubieras independizado-. ¡Como se nos ocurrió perder contra Venezuela!, con ‘chamolandia’ se puede perder una guerra, el respeto, la soberanía, los 6.100 millones de dólares que le vendemos al año, el Vichada, no sé, cualquier cosa; menos un partido de futbol, eso sí que es una deshonra ¿Dónde queda nuestra dignidad? Eso debería dar cárcel, es un irrespeto para con la patria.

Otra cosa que debería dar hasta pena de muerte, es que los señores narradores celebren los goles del adversario como si los hubiera hecho su propio hijo, no sean maricas –y me perdonan la palabra- pero cuando le hacen un gol al equipo de uno, uno se enoja, uno se pone bravo, uno putea, uno hasta llora. Pero no, estos ‘doctores’ –¿quién diablos les dijo a ellos que eran ‘doctores’?- gritan a todo pulmón cuando nos hacen un gol a último minuto.

Lo peor es que no se saben los nombres de los jugadores, le dicen Armero a Falcao García; confunden a Carlos Darwin –un negrito flaquito, chiquitico y bien feíto- con Yepes –un mansito blanco, con barba y súper alto- ¿será que antes también se equivocaban diciéndole Higuita al Pibe? Raro no seria. Y eso que no hablo de cuando se les da por narrar partidos de Inglaterra o algún equipo asiático. Ya se imaginaran la pronunciación de estos tipejos. Si se equivocan en español, ¿Cómo serán narrando un partido entre Pakistán e india?

Señores comentaristas deportivos: ustedes no saben de futbol, dejen de hablar babosadas; retírense, cédanle el puesto a las futuras generaciones. Anímense, el ancianato los espera.

Dizque doctores, doctora mi abuela que le para a uno una diarrea a punta de matas.

Señores jugadores: no sean hijueputas y suden la camiseta, están representando a todo un país, dejen de jugar como niñitas. Parece como si no les pagaran, y muy bien que si lo hacen. La próxima vez seria excelente que los llevaran en bus a Estados Unidos, a ver si asi siguen jugando como lo vienen haciendo.

Y los más importante: a partir de ahora queda terminantemente prohibido perder contra Venezuela; Ecuador; Bolivia; Nicaragua y/o contra cualquier país cuyo gobierno apoye a los terroristas de las Farc. Quiéranse un poquito, bien jodidos que estamos, y ustedes dándoles mas alegrías a la guerrilla. Sean más serios.
He dicho

pd: no se olviden de votar

sábado, 8 de agosto de 2009

NEURODRAMA: diatriba de un publicista en el lugar equivocado

De antemano me disculpo por la demora, no había podido escribir esta semana porque primero, tenía mucha indecisión respecto al tema de la nueva publicación, es que a medida que evoluciona el blog, este coge más importancia, más respeto, y sobre todo, nuevos lectores –así que ya no puedo salir con tantas babosadas tal y como me lo había propuesto cuando cree este espacio-. Segundo, como ya no estoy en vacaciones, no gozo de las mieles del desocupe, por ende, el día a duras penas me alcanza para ir a la U, dormir en la tarde, leer un poco, ver los payasos del factor X y por supuesto, mi serie favorita. Pero no se preocupen, me he obsesionado tanto con este Blog, que les aseguro que voy a estar escribiendo durante mucho tiempo.

El pasado miércoles, mientras faroleaba por la Universidad, me encontré a un parcero que trabaja en el ‘Neurodromo’, un programa que realiza mi queridísima U y que se trasmite por nuestro canal regional –de nuevo Telepacifico involucrado en mis singulares infortunios-. El viejo Michi me repartió un volante y me dijo que estaban buscando presentador para el programa, que si quería, que fuera el jueves a un casting al estudio de televisión.

A mi amigo allá en la U –a quien por razones de seguridad vamos a cambiarle el nombre en esta publicación, vamos a llamarlo… que se yo… Mateo, supongamos que se llama Mateo- le quedó sonando la idea. Y es que no nos digamos mentiras, el hombre tiene el porte, la pinta, el carisma, esa presencia que se necesita para ser un presentador de TV. En cambio uno… uno es consciente de que cautiva mas a la audiencia como libretista, director, productor, no sé, algo que sea detrás de cámara.

-Loco, hagámosle –me dijo Mateo
-No parcero, yo pa’ eso no sirvo
-Hágale viejo, quien quita que estén buscando alguien como usted –insistió él
-jajaja, no parce, más bien como usted –lo anime yo- si quiere lo acompaño
-listo, de uvas, mañana vamos

Al otro día, hice lo mismo de siempre: levantarme tarde –si alguien sabe de un despertador bueno, favor recomendarlo, necesito uno de esos que no se desactivan ni a bala-, bañarme, vestirme, desayunar a la carrera y salir a coger el bus a la luna –no vuelvo a irme en el transouth ni a bate-.

Al llegar, todo normal, cogí el ADN –no para leerlo, ese periódico es paupérrimo, lo único bueno es el sudoku, y eso, porque a veces lo ponen durísimo-. Muy a las 9:00 salimos de inglés, y nos fuimos para el estudio de TV. Estando allá, le tomaron los datos a Mateo y le dieron un libreto; a pesar de ser solo una hojita, fue durísimo de aprender, me consta porque a pesar de que utilice con él mi súper método de aprendizaje –es bastante bueno, ¿o no Matiu?- el wn ese no pudo aprendérselo completo, y es que era de esperarse, solo le dieron como 20 minutos al pobre.

A medida que pasaron los minutos, fueron llegando las niñas que también querían audicionar, muy simpáticas por cierto –si así van a todos los castings, pronto haré uno para que sean la imagen de mi Blog-.

Cuando mi amigo entro al estudio a presentarse, se me acerco el viejo Michi a decirme:

-Y que Juliancho, también vas a hacer el casting
-No parce, usted y yo sabemos que yo no sirvo para eso
-Hágale wn, quien quita que quede –me animó él
-Parce dígame la verdad, ¿usted cree que yo tengo el perfil que están buscando?
-La verdad, no

A las otras viejas las despachaban rapidito, en cambio, con Mateo se demoraron bastante, fue tanto, que Michi decía que seguro le está yendo re bien, que a nadie lo habían demorado tanto. Le dije que fuera a ver, y cuando volvió, solo dijo: ‘mk, ese man tiene mucha memoria, los tiene impresionados’. A pesar de que me dijo solo a mí, las demás personas lo escucharon y se asustaron, comenzaron a decirle que si solo buscaban a un presentador, o si era presentador y presentadora.

Cuando acabó, ya era hora de la siguiente clase, fuimos a Fotografía y cuando salimos, mientras hablábamos de cositas varias, me dijo que porque no hacia el casting, que eso no era cosa del otro mundo y que los manes que lo hacían eran re bien. Después de pensarlo bien, acepte ir al casting, más por escribir sobre eso, que por la esperanza de quedar.

Al llegar ya había menos gente que la que estaba cuando fuimos la primera vez. Ahí estaba el viejo Piter, otro parcero que estudia comunicación social y que también tiene el porte, el registro, el perfil como de presentador –ojala y nunca lea esto, después quien se lo aguanta-. Me tomaron los datos y dije que estaba listo, pues me aprendí el libreto cuando le estaba ayudando a mateo a aprendérselo.

Mientras salía el que estaba audicionando, le dije a Piter que si quería ver como lo iba a hacer, pues iba a entrar era a recochar, no iba a coger el casting enserio. Como el libreto empezaba ‘hola, bienvenidos al neurodromo’ yo hice ese ‘hola’ como el ‘hola’ que hace Vicky Dávila en ‘la cosa política’. Jajajaja de una todos soltamos la carcajada. Y eso no es nada, una frase era sobre lo que le esperaba al futuro ganador, esa parte, la hice al estilo Luis Miguel, mirada de re ojo y señalando a la cámara.

Por supuesto que eso era ahí, entre nosotros, no pensaba ir a hacer esas payasadas frente a una cámara, vaya y después aparezca en YouTube.

Cuando entre al estudio, me pregunte ¿yo qué diablos estoy haciendo aquí? Aun podía arrepentirme, pero no, no lo hice, tome aire y seguí adelante. Me puse al frente de tres personas, dos manes y una vieja, de los manes, solo conocía al director, Luis algo Ronderos.

-Hola Julián, ¿cómo vas? –me saludo la vieja como si nos conociéramos de infancia
-Bien, bien, ¿y ustedes qué?
-Uff esos tenis están una chimba, ¿Cuánto te costaron? -dijo el director, como queriendo romper el hielo
-Los ahorros de todo un año –les respondí
-Ahh veo, ¿y por qué no te los compro tu papá?
-Porque no tengo –le dije yo
El man se sintió como mal, porque de una dijo que empezáramos con el casting, pero el casting ya había empezado, la cámara estuvo grabando desde el momento en que entre.
-1, 2, 3, acción
-Hola! –juemadre, se me salió el Vicky Dávila, mientras no se me saliera el Luis Miguel, todo estaba bien- bienvenidos al neurodromo – hasta ahí me acordé, me quedé en blanco, no sabía que mas decir, se me olvido todo por completo.
-Corte, Julián estas presentando un programa, necesitamos más acción, más entusiasmo –me dijo el director
-Ok
-Dale de nuevo

A medida que avanzaba en la presentación, se me iba olvidando lo que seguía, fue un fiasco total, decía media frase y me tenían que dar pie para seguirla. Tal fue el fracaso, que no me dejaron ni terminar, solo les falto decir: ‘lo haces bien, pero no eres lo que estamos buscando’. Yo creo que llegaron a sentir pena ajena, tal era mi desconcierto, que no supe por donde salir, me tuvieron que indicar hasta donde estaba la salida.

Al salir, de una sentí un poco de miradas expectantes.

-¿Como le fue?- me pregunto Mateo
-No mk, re mal, se me olvido todo

En la vida he hecho muchísimos osos, pero este sin duda, es un fuerte candidato para pelearse el oso más grande. Definitivamente, como presentador, soy un buen Bloguero